A veces me preguntan por qué escribo,
me pauso, y entonces adivino
que lo hago para mí,
o no.
Le doy cuerpo a lo que siento,
a lo que pienso,
a lo que entiendo,
o no.
Pensamientos que comparto
cuando estoy pensando en todo,
cuando en nada pienso o lloro,
o no.
Es el viento el que me inspira
es la falta de reloj
son las risas contagiosas,
y son los ojos del amor,
Sí.
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